María José Reinoso, a quien se le apareció María Rosa Mística, en Centeno, estuvo en la tarde de este jueves en Las Parejas y ante el anuncio de su llegada a la ciudad para realizar una oración entre un grupo de seguidores, la noticia fue corriendo en pocas horas y se concentraron varios centenares de fieles para rezar el Santo Rosario y luego recibir la imposición de sus manos.
El lugar elegido en un primer momento había sido la Plaza San Martín, pero luego decidieron encontrarse en el campito ubicado en calles 29 y 6, frente a Barrio Belgrano.
María José, en diálogo con Radio Las Parejas, dijo que el pedido de María Rosa Mística es que “tenía que llegarme a Las Parejas porque había mucha necesidad espiritual; yo tengo un grupo de mujeres trabajando conmigo y el pedido estaba de venir a Las Parejas, tenía este grupo acá para hacer la novena como lo hacemos allá (Centeno), pero el pedido de la `Madre´ era que yo viniera hasta acá”; para luego manifestar que tratan de no contradecir al sacerdote de Las Parejas, “no está en mi intención, si la `Madre´ está pidiendo que nos acerquemos a los mandamientos, a los sacramentos, a la casa de su hijo que es la Iglesia, pero el sacerdote venía diciendo que no era el momento porque no tenía tiempo, y lo fuimos posponiendo hasta que la `Madre´ dijo `ya está, es el día´, lo decidí esta mañana porque era mucha la insistencia de ella y resulta que esta mañana me entero que la gente se convocaba; es una obra de ella, porque cómo puede ser que a media mañana se corriera así la información, yo pensaba que íbamos a rezar dos o tres mujeres y nada más”, para ampliar sus conceptos en que “me entero al mediodía, porque mi sacerdote me llama por teléfono diciendo que el sacerdote de este lugar (Las Parejas) dijo que no me acercara, que no viniera a predicar”.
María José dijo que esto no es predicar, “sino traer el mensaje y el pedido de la `Madre´, volver a los mandamientos, a los sacramentos y a la casa del hijo que es la Iglesia, con un mensaje de amor, humildad, de volver a la oración, de juntar el rebaño, de rezar por los que tienen necesidades, tantos espirituales como corporales”.
María José dejó un mensaje. “La Madre dice que ella está en este lugar juntando el rebaño para su Santo Hijo, que ya no hay tiempo, me pide mucha oración, que volvamos a los mandamientos, sacramentos y la Casa de su Hijo, la Iglesia; que seamos humildes, generosos como era su Santo Hijo y rezar mucho por los adolescentes, para que encuentren el camino, que es Dios, no es el alcohol ni la droga, es Dios el Camino”.
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