Durante la tarde del domingo, Sportivo Atlético Club obtuvo
un nuevo título en lo que a fútbol refiere, en el Torneo Clausura de la Liga
Cañadense.
Con este Bicampeonato, hubo festejos, cánticos, papelitos,
bombas, la clásica caravana por las calles de la ciudad, y mucha rienda suelta
para la celebración de la parcialidad rojiverde.
Pero dentro de tanta alegría, también hubo situaciones que
lamentar: el estallido de bombas durante la madrugada, que lejos de seguir
siendo de festejos, y más allá de provocar temor en los animales callejeros,
fueron colocadas en distintos lugares puntuales de la ciudad, principalmente en
los domicilios de referentes del Argentino Atlético Club, rival histórico del
Lobo.
Algunos simpatizantes, hicieron estallar bombas de estruendo
en horarios insólitos, y en lugares que podían haber provocado mucho daño, sin haberse tenido en cuenta ese detalle.
Se colocaron varias bombas en un
garage con la presencia de vehículos; en cercanías de una estación de
servicio, y también, como la foto lo muestra, en el ingreso a una vivienda, donde la onda expansiva del explosivo hizo estallar los vidrios de la abertura.
Festejos desmedidos, sin dudas, que podrían haber terminado de otra
forma.
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